La influencia de las fragancias es muy importante para nuestro bienestar. Vale la pena combinar la terapia de fragancias con otras actividades relajantes. Es una gran idea envolverte en el aroma mientras te bañas en la bañera o antes de acostarte. Cada aroma tiene un efecto diferente y puede calmarte, hacer que sea más fácil conciliar el sueño o, por el contrario, energizarte, estimularte.
El uso de velas en aromaterapia
El olor de las velas es bastante sutil. Puede ajustar la intensidad del aroma aumentando el número de velas encendidas. Si encendemos velas en una estancia bastante grande, es mejor apostar por un gran número de velas pequeñas, porque una sola vela puede no ser suficiente. En una habitación pequeña, por ejemplo, en un baño, unas pocas velas o una con un aroma más fuerte pueden ser suficientes. No combine diferentes aromas de velas al azar. Lo mejor es elegir un tipo de velas para que la fragancia resuene en la habitación.
El aroma debe adaptarse al estado de ánimo y la situación. Durante la velada junto a la chimenea, las velas aromáticas de canela, almendra o café serán una gran elección. Por otro lado, durante un baño con mascarilla facial, los delicados aromas florales complementarán perfectamente el estado de ánimo relajante.
Aceites esenciales en aromaterapia
Si el aroma de las velas no es suficiente, puedes combinarlo con uno a juego aceite de fragancia. De esta manera, las velas crearán el ambiente y el aceite en la chimenea perfumada realzará el aroma en la habitación. Los aceites también se pueden utilizar solos. Tienen un olor muy intenso, por lo que quedarán perfectos como única fuente de aroma en la estancia. Se pueden utilizar de varias maneras. El más popular es el uso de chimeneas perfumadas. Los aceites también se pueden añadir al aceite de masaje o al agua de baño o sauna.
Los aceites esenciales tienen propiedades para la salud, por lo que además de un olor agradable, pueden ayudar a tratar algunas dolencias. El aceite de árbol de té ayuda a tratar las infecciones respiratorias, el aroma de eucalipto alivia la depresión y el aceite de romero ayuda a la concentración.
También vale la pena buscar mezclas de aceites listas para usar con aromas interesantes, por ejemplo, pastel de chocolate o manzana al horno.